lunes, 18 de marzo de 2013

Champions/Americanos, a cuartos


¡39 futbolistas de América!  aspiran a la final en Wembley

Por Miguel Miró
Llegará un día que todas las estrellas de fútbol decidan hacer una “huelga de medias caídas”. No son serios los calendarios, ni tampoco la cantidad de partidos (más de 100) que se disputan cada temporada.
En lugar de calendarios parecen una tortura.
¿En qué estarán pensando los dirigentes?
Sobre todo para todos aquellos que se tengan que trasladarse en avión –como si fuera un taxi o el metro– de un continente a otro. Poco más o menos unos 16.000 kilómetros. ¡Casi na!
Lo decimos especialmente por los sudamericanos o americanos en general.
En Europa se acumula Copa–Liga y entre semana las eliminatorias para la Copa del Mundo 1914. Si unimos a la Copa de Europa (Champions League) o la Copa UEFA, la liamos. La cantidad de partidos se disparan. Pueden ser –lo son, lo son– un infierno para las estrellas del fútbol sudamericano.
Pero hay más, en la Premier League del Reino Unido no sólo son FA Cup y League (44 matches), se disputan otras dos competiciones más dentro del calendario.
Al final, entre viaje y viaje las estrellas del fútbol terminan con la lengua fuera. Agotados, desquiciados y extenuados de tanto traqueteo. 

Lo saben bien en el golf:
 “Al final te conviertes en una maleta en lugar de un deportista”.
El razonamiento se centra solo en “la maleta” por los viajes, pero vale para todos los golfistas. En cambio los de elite tienen su avión particular, con “catre” y todas las comodidades. Sin necesidad de estar dos horas antes en el aeropuerto y que el vuelo se retrase.
Sin embargo, de todo hay entre los futbolistas que cambian de continente como si cambiaran de camisa. Lo más desagradable resulta cuanto su selección pierde… y a las estrellas se les recrimina.
“¡Rinde más en su club que en la selección!”
Para rematar también existe otro baile que los jugadores deben soportar. El cambio de horario, cambio comidas y sin tiempo para disfrutar con la familia.
Tan sólo visitas de médico. 

KEMPES LO SABE
Cuando Mario Alberto Kempes llegó a Valencia no sabía en la hora que vivía. Y si había dormido bien… de día o de noche. En su debut en el campo de Mestalla (amistoso y nocturno ante Hércules de Alicante) parecía un pato mareado en el campo. Falló cinco goles en la boca de gol, y el presidente del club valenciano le quería enviar otra vez para Argentina.
Menos mal que en el banquillo había un técnico sensato (Heriberto Herrera) que asumió toda la responsabilidad y convenció al presidente, José Ramos Costa. “Todo ha sido por el cambio horario y las comidas, hay que dar tiempo al tiempo. No se arrepentirá de haberle contratado”.
Kempes no sólo fue el máximo goleador del equipo. Un ídolo irrepetible. Le llamaban “El Matador” y sigue siendo muy querido entre la afición valencianista.
Incluso tenía un slogan:“¡No diga Gol, diga Kempes…!”

EL BAILE MONTADO
En cuestión de días los sudamericanos tendrán que cargar las pilas porque llega el maratón de partidos. Las eliminatorias para el Mundial, la Liga, la Copa y para rematar la Copa de Europa.
Es la tormenta del otoño.
Los ocho mejores equipos europeos jugarán el próximo mes de abril las eliminatorias –a doble partido– de  los cuartos de final de la Copa de Europa (Champions League). Estamos, como quien dice, a tan sólo dos escalones de la final, que se dirimirá en el estadio de Wembley el 25 de mayo.
Los sudamericanos deberán estar enchufados y muy concentrados.
¿Liga? ¿Copa? ¿Selección?... ¿o la tradicional Copa de Europa?
Y... sin posibilidades de elegir.
¡Vaya empanada mental!
Vamos a buscar la calculadora.
Con cinco jugadores americanos más, sumarían 44 y supondría –¿están sentados?– ni más ni menos que el 50% de los ocho mejores equipos de Europa clasificados para los cuartos de final.
En principio pensamos que llegarían a un tercio de los equipos, pero nos llevamos una grata sorpresa.
La cifra es impresionante. Asimismo, más de 80% de todos ellos son titulares en los equipos en liza de la prueba reina europea.

AMERICANOS CHAMPIONS
Los ocho mejores equipos del Viejo Continente cuentan en su plantel a 39 jugadores americanos. Málaga CF, la revelación en Europa, es el club que más jugadores  tiene del continente americano. Una docena. Tres argentinos, tres brasileños, dos uruguayos y dos chilenos. Además, un paraguayo (Roque Santa Cruz) y un norteamericano (Oguchi Onyewu).
Le siguen FC Barcelona (7), París Saint Germain (6), Bayern Münich y Real Madrid (4), Juventus (3), Galatasaray (2) y Borussia Dortmund (1).
La lista completa es la siguiente:

MÁLAGA (12)
W Caballero, Martín Demichelis*, Javier Saviola (Argentina)
Welington Oliveira, Julio Baptista*, Lucas Piazon* (Brasil)
Diego Lugano*, Sebastián Fernández* (Uruguay)
Pedro Morales y Manuel Iturra (Chile)
Oguchi Onyewu (Estados Unidos)
Roque Santa Cruz* (Paraguay)
FC BARCELONA (7)
Daniel Alves*, Thiago Alcántara, Adriano Correia* (Brasil)
Lionel Andrés Messi*, Javier Mascherano* (Argentina)
Alexis Sánchez* (Chile)
Jonathan Dos Santos* (México)
PARIS SAINT GERMAIN (6)
Maxwell Scherrer, Thiago Silva*, Alex Dias da Costa y Lucas Moura* (Brasil)
Javier Pastore*, Ezequiel Lavezzi* (Argentina)
BAYERN MÜNICH (4)
Luiz Gustavo Dias, “Rafinha” Ferreira da Sousa, Dante* Bonfim Costa (Brasil)
Claudio Pizarro* (Perú)
REAL MADRID (4)
Gonzalo Higuaín*, Ángel di María* (Argentina)
Marcelo Vieira Da Silva*, Ricardo Izecson dos Santos “Kaká”* (Brasil)
JUVENTUS (3)
Mauricio Isla*, Arturo Vidal* (Chile)
Martín Cáceres* (Uruguay)
GALATASARAY (2)
Fernando Muslera* (Uruguay)
Felipe Melo (Brasil)
BORUSSIA DORTMUND (1)
Felipe Santana (Brasil)
 [* Internacionales. Juegan o jugaron en la selección nacional de sus respectivos países]

SORTEO ¼ DE FINAL COPA DE EUROPA
02/04/2013. Parque de los Príncipes. París St Germain vs. FC Barcelona.
02/04/2013. Arena Stadium. Bayern Münich vs. Juventus Torino
03/04/2013. Rosaleda Stadium. Málaga CF vs. Borussia Dormund
03/04/2013. Bernabéu Stadium. Real Madrid vs. Galatasaray
[Los matches de vuelta se disputarán  el 9 de abril (Barcelona-PSG y Juventus-Bayern) y el 10 de abril (Borussia D-Málaga y Real Madrid-Galatasaray].

jueves, 14 de marzo de 2013

Análisis / Barcelona-Milán


Al tercer “match” resucita Barcelona y su fútbol…

Por Miguel Miró
El equipo azulgrana dejó de lado la ausencia del entrenador y de un presidente sin luces. Dejó de lado las protestas, los árbitros, la apatía, los goles en contra, sus propios errores… y selló la boca a los detractores, que se frotaban las manos anunciando el final de ciclo –que dura más de dos décadas– y a todos aquellos que “soñaban” en su eliminación en la Copa de Europa.
El FC Barcelona resucitó al tercer “match” y el fútbol en general y los buenos aficionados en particular, volvieron a festejarlo. No fue fácil. Había dudas. ¡Quién no las tenía! Parecía casi imposible y nunca lo negamos después del match dirimido en el Giuseppe Meaza.
El AC Milán, con sus siete Copas de Europa, no era un plato exquisito para “comérselo” en un santiamén. Y más teniendo una ventaja de dos goles. Un freno (desde 1992) que ponía la estadística a su favor en la competición reina.
Sin embargo, el equipo azulgrana cambió el chip y se “zampó” a su rival, sin perder para nada su modelo de juego. Arriesgando, sí, al colocar a tres defensas, pero poniendo en práctica las premisas de José Guardiola, Johan Cruyff... y los “sombreros” en defensa (Mascherano, Adriano y Alba) que se inventó Tito Vilanova en la presente temporada.

MENTALIDAD GANADORA
Presión intensa en la recuperación del balón en todo el campo y mentalidad “ganadora” (aún con desventaja en la eliminatoria), pero con orden y concierto, cabeza fría e inteligencia. Sobresaliendo, ante todo, la actitud, la calidad técnica y sobre todo la “garra”.
Actitud alta por el compromiso. Recuperación de una calidad técnica contrastada. Por último, la “garra” al no dar nunca por perdido un balón y una fe increíble en la clasificación para los cuartos de final.
La gran mayoría de los medios, como suele ser natural, hablan de una noche “Messiánica”. En cierta parte, lógico. Los goles y los pases de gol remarcan los resultados. Nadie duda de la magia de Lionel Messi.
No obstante, analizando fríamente el Barcelona-Milán y sin menospreciar a todo un equipo que se entregó en cuerpo y alma, la llave maestra de la victoria estuvo en “los dos locos bajitos” (como Juan Manuel Serrat llamaba a los nanos en su canción).
Todos saben a quienes nos referimos: Javier “Xavi” Hernández y Andrés Iniesta. Tanto uno como el otro. Ambos fueron los dueños y señores del timón del barco azulgrana. Y los dos se desdoblaron en misiones defensivas y ofensivas.

MILÁN USA SUS “ARMAS”
No estamos de acuerdo con muchos especialistas que dicen: “El Milán se encerró en su área”. El cuadro “rossonero”, con una ventaja de dos goles, utilizó sus bazas. No se encerró en su área, sino todo lo contrario. Desplegó sus líneas en su campo –que no es lo mismo– y en ningún momento “renunció” al ataque a través del pelotazo y la contra.
Esperó el momento, como el cazador furtivo protegiendo su territorio.
Sus “armas” fueron Stephan El Shaarawi y M´Baye Niang. Savia joven con la velocidad del viento para buscar la apertura del marcador.
La historia podría haber sido muy distinta si Niang consigue el empate en su mano-a-mano con Víctor Valdés que escupió el palo derecho del guardameta. El franco-senegalés arrancó al medir mal un despeje de Javier Mascherano y por descuido de Jorge Alba (adelantado).
Además, Milán no perdió su compostura después del primer gol de Messi. Intentó la sorpresa con una subida de Zapata y el pelotazo (varias veces mal medidos desde la segunda línea) a la banda izquierda. En el segundo tiempo adelantó sus líneas –al replegarse su rival–  en busca del gol de la clasificación y terminó “pagando” con el tercer tanto azulgrana.
Aún así nunca bajó la guardia ante un rival que dominaba la situación. Tuvo, igualmente, una ocasión de oro de Robinho, completamente solo dentro del área que Alba (uno de los “sombreros” inventados por Vilanova) neutralizó en el momento del disparo.
Y, si alguien vuelve a repetir que Milán jugó a la defensiva, ¿podría explicarnos cómo acabó el partido con cuatro delanteros (Boateng, Robinho, Bojan y El Shaarawi) y un volante ofensivo (Muntari)?


BARCELONA: PACIENCIA E INTELIGENCIA
El equipo azulgrana volvió al sistema clásico (1-3-4-3 o 1-3-2-2-3 de Herbert Champman). Se puede apreciar (ver gráfico superior) igualmente el paso atrás de Mascherano y el “sombrero invertido” de Alba para prevenir cualquier fallo. Al mismo tiempo la posición de Busquets a las espaldas de Xavi, que le toca jugar de “enganche o mediapunta”, más adelantado, mientras que su lugar lo cubre Iniesta (como volante). Messi al centro o a la derecha como falso “9” por detrás de Villa, que sin balón arrastra a Zapata o Mexes. Alves como extremo nato y Pedro sube-baja como un ascensor.
Ya, el adelantamiento de Xavi y el relevo de Iniesta es vital para “romper” la defensa milanesa, pero también la concentración en la retaguardia. ¿Por qué insiste por la banda derecha? ¿Messi que se mueve hacia la derecha? No. Para aprovechar el adelantamiento de Mexes, mientras que Zapata estaba pendiente de Villa. Uno de los puntos negros del Milán.
Además, el equipo local aprovechó el marcaje en zona al hombre de su rival para hacer la presión en la pérdida del balón. Una presión intensiva en todo el campo, pero sobre todo adelante.
En ese error-acierto, llegó el primer gol. Muy rápido. Error de Mexes en la salida y acierto en la conexión de Xavi-Messi. Después los remates de Xavi e Iniesta desde fuera del área en un sube-baja y relevándose en sus posiciones. Además, estaba la movilidad de sus compañeros en el eje y adelante. La insistencia de la banda derecha se repetiría varias veces, pero también por la izquierda, que terminó con el penalty-no-pitado de Abate a Pedro. (Le empujó con el brazo para desequilibrarlo)
No es la primera vez que lo decimos. Ya en los años de José Guardiola, siempre que Xavi se adelantaba, el Barcelona pisaba el acelerador… como preludio de un alegre e inteligente fútbol de ataque. Sin olvidar, por supuesto, los movimientos de Andrés Iniesta en el eje del campo.
No todos fueron aciertos en un partido de alta tensión. Alba se asomaba por la banda izquierda, pero no recibía el balón. También subió Piqué y llegó el drama. Por la velocidad de Niang ante Mascherano que mide mal la distancia. Al final, balón al palo.
Un susto con respuesta inmediata, porque Iniesta ha sido quién robó el balón en el centro del campo y vino el segundo gol local. El empate (2-2). Iniesta-Xavi-Messi y el movimiento, sin balón, de Villa dentro del área. 


VUELTA A LOS CUATRO ZAGUEROS
En el segundo tiempo Barcelona volvió a los cuatro zagueros (1-4-1-4-1), pero los “locos bajitos” (Iniesta-Xavi) se juntaron en la zona ancha para montar su laboratorio. (Ver gráfico superior) Éste repliegue fue una invitación a Milán para adelantar sus líneas.
Pero hay otro pequeño y gran detalle: Daniel Alves, en la línea de cobertura y ya, descaradamente, Villa y Messi casi pegados, se situaron en la banda derecha.
Nuevo plan de juego (al contraataque) y una mayor confianza entre los jugadores. Se apreció claramente. La reiteración de los pases triangulados al primer toque con total precisión y confianza. El equipo se soltó y jugó con más seguridad, tras la tensión de los primeros 45 minutos. Además de la confianza que suponía el resultado del marcador.
El tercer gol llegó por el desajuste de la retaguardia de Milán, con sus líneas adelantadad y ya con tres delanteros fijos al ver el repliegue del contrario. En busca del gol que le clasificaría para cuartos. Messi “fija” a Constant en la banda, y la jugada se produjo por el centro, con Xavi de enganche. El pase en profundidad no fue para Alves, sino para Villa por la derecha que no perdona.
Faltaba más de media hora para el final, pero Barcelona ya tenía controlada la situación. Dominaba con autoridad el partido. 


APRIETA EL RIVAL Y LLEGA EL ÚLTIMO GOL            
Sólo faltaba mantener la calma y el “balón” en el último cuarto de hora y buscar un contragolpe en velocidad. Llegó en el tiempo añadido. Precisamente cuando el adversario apretaba de forma precipitada con cuatro atacantes y se habían realizado todos los cambios. Con la presencia del capitán Carlos Puyol, en el centro de la zaga; Adriano, como lateral y Alexis Sánchez en la banda derecha.
Un pase medido de Messi al chileno y éste, a renglón seguido,  cruzó el balón ante la galopada de Alba por la izquierda. Una jugada de billar a tres bandas. Barcelona y su fútbol recuperaron su autoestima sin haber perdido ni un ápice toda su esencia en un partido brillante e inteligentemente disputado. 


 MILÁN: LA FALTA DE ACIERTO ASFIXIA SU JUEGO
Dos cambios realizó la AC Milán con respecto al primer partido del Giuseppe Meaza. Igualmente, varió su esquema y la posición en el  mediocampo para el encuentro frente a Barcelona (1-4-3-3). Puso a Monteolivo, como volante izquierdo y a Flamini (por Muntari), a la derecha, mientras que Ambrosini en tareas de stopper.
No nos sorprendió, sin embargo, la presencia de M´Baye Niang (18 años) en el lugar de Pazzini (lesionado). Máxime teniendo en cuenta la explosión en el arranque y la velocidad del franco-senegalés.
No se encerró en su área y cubrió todo su territorio. Sus intenciones: marcar un gol que le diese el pase a los cuartos de final. Dos delanteros rápidos, al contragolpe con pelotazos largos y aprovechar algún error de su contrincante.
Sin embargo, se encontró con un gol temprano de Barcelona, pero no se descompuso. Mantuvo el tipo, sin acierto aparente en los pases largos a El Shaarawi y un Montolivo muy apagado en su juego. 
Tuvo, eso sí, una gran ocasión para arruinar la fiesta de la noche. Un despiste de Mascherano que aprovechó Niang para plantarse solo ante Víctor Valdez. Una ocasión de oro en la que el balón repelió el segundo palo salvándose el equipo local. 


DEMASIADA TENSIÓN Y… CUATRO DELANTEROS
Empatada la eliminatoria, la squadra italiana adelantó sus líneas al centro del campo, pero se encontró con un Barcelona muy seguro en tareas defensivas y jugadores que desequilibran por su virtuosismo y calidad.
Massimiliano Alegri le vio las orejas al lobo y se lo jugó todo en la mitad del segundo tiempo, con la entrada de dos delanteros (Robinho y Bojan) y un volante ofensivo (Muntari).
Un riesgo que pagó caro (el cuarto gol de Barcelona) y la inoperancia de sus jugadores, por la alta tensión, que no acertaban –por precipitación o ansiedad– batir a Víctor Valdez. A excepción de Robinho que disfrutaría una oportunidad única dentro del área, después de dos rechazos. Cuando el delantero brasileño se preparaba para rematar se cruzó a tiempo Alba, logrando evitar el gol.

martes, 12 de marzo de 2013

Champions/ ¿POR QUÉ…?


Decisión ”arbitraria e injusta”
elimina a United de Europa

Por Miguel Miró
 Si hubiese justicia en el fútbol –que no la hay– el match Manchester United vs. Real Madrid disputado en Old Trafford se debería repetir. A tenor de la “arbitraria e injusta” decisión del colegiado turco Türneyt Çakir al expulsar a Nani. No hay peor sospecha en cualquier deporte y menos en el fútbol… Cuando un árbitro –equivocándose o no– se convierte “juez y parte” en un partido.
Los intereses creados del organismo europeo (UEFA), de los equipos en la competición reina y la presión de las televisiones (Manchester-Real Madrid alcanzó una audiencia que rozó los 10 millones, unos 9,800.000 de tele-espectadores) no permitirían una “repetición”.
Sin embargo, ¿quién repara el daño consumado al equipo inglés?
¿Puede recurrir a la justicia Manchester United?
Rotundamente, no.
Únicamente lo puede hacer al Comité Disciplinario de la UEFA o de la FIFA?

¿ES INFALIBLE "THE BOSS" CODINA?
Aún así, no serviría para nada. Y menos después de la “nota” (seguimos en el colegio: 8,2) del omnipotente Pierluigi Codina (su imagen dio la vuelta al mundo pidiendo “respeto” a los árbitros). Precisamente el “boss” del estamento arbitral en el Comité de Árbitros de la UEFA.
Los periódicos británicos echaron mano de la hemeroteca y comprobaron que, con la tarjeta roja de Türneyt Çakir sumaban seis expulsiones a jugadores de la Premier League y la eliminación de equipos británicos en la Champions League y la Copa del Mundo de clubs. La mayoría de ellas, no obstante, expulsiones justificadas. Pero se olvidaron del partido Real Madrid-Tottenham disputado en Chamartín.
La expulsión “provocada” al delantero Peter Crouch por Ramos y Marcelo, que el árbitro alemán Felix Brych “picó”. Una expulsión “sospechosa” que dejó con 10 jugadores a los ingleses durante 76 minutos.
Seguro que el entonces manager del Tottenham Harry Redkaap se lo puede explicar con pelos y señales a Alex Ferguson.



LA EXPULSIÓN NO TIENE NI PIES NI CABEZA
La expulsión con tarjeta roja a Nani no tiene ni pies ni cabeza. Resulta totalmente injusta. Sobre todo porque en ningún momento el jugador del equipo inglés hizo la más mínima “intención” de dañar al rival. Ni tampoco se trató de una jugada violenta como así fue interpretada de forma errónea por el árbitro, junto al linier que apreció la incidencia del juego desde siete o 10 metros.
Resultan igualmente sospechosos los minutos –que no segundos– que demoró el colegiado antes de tomar su decisión en el campo.
¿Escuchaba al linier por “el pinganillo” o al cuarto árbitro? ¿O al delegado arbitral, en las tribunas? ¿Estaba midiendo la repercusión de la expulsión? ¿Las dudas, las muchas dudas?
Otra cuestión que muchos pasaron por alto. ¿Por qué rodean inmediatamente al árbitro Sergio Ramos, Javier Alonso, el propio Álvaro Arbeloa y Messut Özil? Todos le están pidiendo la tarjeta roja al juez.
En el estamento arbitral, cuando hay dudas no se pita nada para no incurrir en un error monumental. No obstante, ante la sorpresa de la mayoría muestra la tarjeta roja al jugador portugués.


NANI ENCOGE EL PIE AL VER AL RIVAL
a)    El jugador del United está de espaldas, por tanto no aprecia la llegada del rival.
b)   La pelota le pega en el pecho a Arbeloa, que simula el impacto de una patada en las costillas.  
c)    Al ver el jugador de Manchester United la llegada del adversario encoge la pierna. La imagen demuestra  que la bota de Nani le roza el brazo una vez que rechaza el balón el madridista con el pecho.
d)   La simulación de Arbeloa, sin embargo, parece perfecta.
e)    Curiosamente, el jugador madridista es el primero que se levanta y sigue jugando.
f)     No hay intencionalidad.
g)   Un lance del juego. Entre los dos contendientes está el balón.
h)   Lo que más confundió, indudablemente, fueron las distintas imágenes de la televisión. Y algunas de las fotos que se publicaron. Sobre todo por “el ángulo de foco del cameraman” o del fotógrafo. Al unir las fotografías y comprobar que Nani encoge el pie se demuestra que no hubo intención, ni tampoco “violencia” ni “temeridad” en la acción.
i)     Un ejemplo de una misma jugada se produjo en el match Levante-Real Madrid, en la que un golpe fortuito de Navarro le rompe la ceja a Cristiano. El defensa granota David Navarro  mueve los brazos al ver la “embestida” de su compañero Juanfran que quiere intervenir para despejar el balón. Por lo tanto, no hay “intencionalidad”. Así lo entendió el colegiado asturiano Muñiz Fernández: no pitó nada ni sacó ninguna tarjeta en los primeros minutos del primer tiempo, bajo una lluvia torrencial. Dejó seguir la jugada.
j)     Sin embargo, la más clara secuencia de “simulación provocada” o “engaño” –como ustedes prefieran–  se produjo el 5 de abril de 2011 en los cuartos de final de la Copa de Europa. Una trampa preparada y “festejada por los dos actores”, para eliminar al Tottenham Hostpur en el partido de ida en Chamartín (4-0). La expulsión de Peter James Crouch por doble tarjeta amarilla tras una simulación de Ramos y Marcelo.


 ¿POR QUE PONEMOS EL ÚLTIMO EJEMPLO?
Aún mantenemos en la retina la “complicidad” manifiesta entre Marcelo y Ramos. Especialmente del brasileño que en el suelo, con las dos manos en la rodilla, buscaba a Ramos y se reía. Las imágenes de televisión española demostraron la picaresca.
Una simulación coordinada de dos entradas del larguirucho jugador dejaría al Tottenham Hostpur con 10 jugadores durante 76 minutos del partido. Real Madrid dejó sentenciado su paso a las semifinales con un rotundo 4-0, goles de Adebayor (2), Di María y Cristiano.
El árbitro alemán Felix Brych cayó en la trampa y “picó” por el teatro de los dos jugadores madridistas, que se revolcaron de dolor en el suelo. Un juez, licenciado en Derecho, e inexperto (The Telegraph) que sacó dos tarjetas amarillas seguidas al delantero británico. A Crouch por una falta a Ramos (7´) y a Crouch por una falta a Marcelo (14´) y le mandó a la ducha.

“EMBACAUDOR MARCELO” (THE TELEGRAPH)
By Jason Burt, Santiago Bernabéu Stadium
(…) It was such a shame; a shame for Crouch, a shame for Redknapp, the club and the fans who have been swept along on this fantastic journey. When Angel Di Maria struck a thunderous third goal it was like a visitation from the Angel of Death and when Cristiano Ronaldo drove in the fourth, with Heurelho Gomes flapping, it was all over.
(…) But it all came back to Crouch. What was he thinking? How could such an experienced player have acted so foolishly? He collected a yellow card after just five minutes for lunging at Sergio Ramos and then, after Benoit Assou-Ekotto’s raking cross-field pass was cut out by the formidable trickster that is Marcelo, Crouch launched himself at him also.
It was clear what was going to happen next. A second yellow, then a red, from referee Felix Brych and Crouch was off with Mourinho ruffling his hair in sympathy as he passed by (…).
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(…) Fue una vergüenza, una vergüenza para Crouch, una vergüenza para Redknapp, el club y los aficionados que se han desplazado en este fantástico viaje. Cuando Angel Di María llegó a un tercer gol atronador fue como la visita del Ángel de la Muerte y cuando Cristiano Ronaldo empujó la cuarta, con Heurelho Gomes aleteo, que todo había terminado (…).
 (…) Pero todo se volvió hacia Crouch. ¿Qué estaba pensando? ¿Cómo podría un jugador experimentado ha actuado tan tontamente? Él recibió una tarjeta amarilla después de sólo cinco minutos para embestir a Sergio Ramos y, a continuación, después del pase cruzado de  Assou-Ekotto fue cortada por el embaucador formidable que es Marcelo, Crouch se lanzó a él también. Estaba claro lo que iba a suceder después. Una segunda tarjeta amarilla, y luego una roja, de árbitro Félix Brych y Crouch fue apagado por Mourinho, agitando el pelo con simpatía a su paso. (…).

EXPULSIÓN DE PEPE
En las semifinales se enfrentaron Real Madrid-Barcelona con escándalo incluido, tras la expulsión de Pepe, que precisamente recordó el entrenador del equipo merengue en “la sala de prensa de Old Trafford”.
La temporada lamentable de los cuatro “clásicos violentos” en 18 días y de la sanción del Comité Disciplinario de la UEFA al técnico de Real Madrid por siete partidos (la máxima, 17) tras “rajar contra los árbitros” sin pruebas y “manchar” –como es su costumbre– al FC Barcelona insultándole en su monólogo del “¿Por qué…?”