España
prueba dos fórmulas
para el
match ante Finlandia
Por Miguel Miró
La selección española prueba dos fórmulas
distintas en cada tiempo en el partido amistoso frente al combinado de Ecuador.
Asimismo recupera el tándem Silva-Cazorla
que destacó en la gira a Estados Unidos hace unos años. Vuelve a contar con
Javier Martínez como stopper, atrás y delante de la línea de volantes y Andrés
Iniesta como organizador en la zona central.
Vicente del Bosque aprovecha para darle más
responsabilidad a Albiol, que será titular ante Finlandia por sanción de Piqué.
Apuesta por Negredo para fijar a los zagueros y arriesga con el novel Tello por
su punta de velocidad.
En cuanto al plan de juego, aumenta la
movilidad –cambio de posiciones – aumenta la presión en la recuperación del
balón y adelanta líneas para poblar aún más el eje del campo. Tres detalles más
que son importantes, aparte de jugar al primer toque: intensidad, inspiración
personal y mayor profundidad en el ataque.
La permuta de posiciones pone en aprietos a
su rival en los marcajes – desordenando su andamiaje defensivo– y la
imaginación se multiplica con el tándem Silva-Cazorla, juntos o separados, sin
olvidar un buen soporte en sus espaldas, con Iniesta de organizador y Javier
Martínez de stopper.
LAS AUSENCIAS NO SE NOTAN
Dos tiros a los postes y un gol de tacón,
dan prueba de su efectividad y destaca la virtuosidad y la precisión en los
pases, cortos o largos al espacio y siempre con el apoyo constante de todo el
equipo. No se notan las ausencias y Del Bosque le da paso a otros jugadores,
que ya son estrellas en sus equipos y asiduos en la selección nacional.
Eso sí, se insiste en el remate desde media
y larga distancia.
En principio pensamos que iba a poner el
ataque que tiene en “su mente” Manuel Pellegrini en el Manchester City… sin Kun
Agüero. Pero el técnico español hizo un
guión muy interesante y de éxito en los primeros cuarenta y cinco minutos del
partido. Con una vertiginosa velocidad del balón al primer toque.
En el complejo entramado y la salida en
tromba hacia el área rival sobresalió más la sensación de equipo, en el que se
conocen todos y el tándem Silva-Cazorla prácticamente con los ojos cerrados. Un
cambio de chip en el grupo –cambios cantados y jugadas con marchamo de gol– a
pesar de que algunos despistados se fijaran solamente en Tello como única
novedad.
Lo más notable es que la generación de
buenos jugadores (sean unos u otros nombres) sigue creciendo en el fútbol
español.
CAMBIO DE FÓRMULA Y DE FIGURAS
Vicente del Bosque, además de buen
entrenador, es bastante previsor. Y nos cambia la fórmula tras el descanso.
Mantiene a Tello en la banda izquierda (todo el partido, para que espante los
fantasmas) y entra Navas junto a Fernando Llorente y Thiago. Lo del guardameta
estaba cantado.
El plan B, para el partido oficial contra
Finlandia.
Sin bajar la guardia, eso sí. Pero con otra
variante (ahí se creció la selección de Ecuador): el contragolpe por la iniciativa.
Bien en pases cortos o largos o salidas en velocidad. La intención era agrandar
el campo para que la respuesta sea responsabilidad de los dos extremos, bien en los pasillos o
surgiendo en diagonal. Explosión en el arranque y velocidad. Para sorprender al
rival por las bandas.
Es cierto que el equipo con ésta nueva
estrategia (y los continuos cambios durante el partido) no brilló tanto como en
la primera parte, pero dejó bien claras sus intenciones. Más práctico que
vistoso. Aunque más activo Navas que Tello en la salida en velocidad.
Thiago, por otro lado, le costó entrar en
juego como organizador. Mas no desentonó con el nuevo planteamiento del equipo.
Tiempo tendrá para irse acoplando en los próximos partidos.
También queriendo o sin querer (o es una
norma) se les dio menos minutos a Íñigo Martínez (24´) y a Koke (14´) en su
primera aparición en el equipo nacional. Aunque el central, que sustituyó a
Ramos, tuviera más trabajo que el volante.
ECUADOR REACCIONA EN EL SEGUNDO PERÍODO
La selección ecuatoriana se sorprende del
juego de España desde el inicio. Sobre todo por la facilidad que tienen en el
cambio de posiciones en el campo. Además, el sistema clásico de los
sudamericanos (velocidad y presión) se queda en el limbo del olvido, al no
“oler” el balón en la primera media hora.
Aunque también es verdad: el
técnico local optó por el contragolpe
desde el pitido del árbitro.
Calcula mal, sin duda. El equipo español no
deja espacios (por la presión en la zona central) al adelantar las líneas y es
superior a su adversario.
Así y todo los locales, jaleados por un
estadio lleno hasta la bandera (campo del Emelec de Guayaquil), el conjunto
local reaccionó bien tras el descanso. Y tiene varias ocasiones claras para
igualar el marcador. Pero como sucede muchas veces en el fútbol, España le
“roba la cartera” en una contra en velocidad. Cazorla consigue el segundo gol
cuando mejor estaba jugando Ecuador y se acaba la historia.
Ecuador, a pesar de todo, no es un rival
fácil. No nos engañemos. Lo está demostrando en las eliminatorias para el
Mundial de Brasil - Zona Sudamericana, en la que se clasifican los cuatro
primeros.
La selección ecuatoriana figura actualmente
en tercera posición en la clasificación de la Liguilla, empatada con Chile
(ambos con 23 puntos y 12 matches disputados). Además, muchos de sus jugadores
son figuras en Europa.
Sus dos próximos compromisos se enfrentarán
a Colombia y Bolivia los días 6 y 10 de septiembre, respectivamente.
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