Ajax, causante del boicot
a la Copa Intercontinental
Sin quitar méritos a los 50 clubes campeones
y sin quitarle mérito igualmente al Corinthians de Sao Paulo, flamante vencedor
2012, la Copa del Mundo de Clubes (antes, Copa Intercontinental) no termina de
calar entre los buenos aficionados al deporte.
En una palabra, no termina por consolidarse
en el concierto del fútbol mundial. A pesar de su larga vida –“50 años no son
nada…”– todavía no despierta pasiones y su repercusión, ¡para
qué nos vamos a engañar!, resulta insulsa, con poco interés y ridícula.
Hasta tal punto se llega a la hipocresía que
muchos medios deportivos europeos sigan llamándole peyorativamente: el “Mundialito
de Japón”. No ocupa, además, la portada de algunos periódicos.
Como si se tratara un bolo, un amistoso de
verano o simple y llanamente una pachanga de fútbol.
Santos Club de Fútbol (Brasil) |
Por Miguel Miró
También es verdad que la competición tuvo un
auge esplendoroso en sus comienzos. Cuando empezó llamándose “Copa
Intercontinental” organizada por las federaciones de Sudamérica (Conmebol) y
Europa (UEFA).
Un enfrentamiento a dos partidos en sus
respectivos países entre los campeones de América y los campeones de Europa. La
idea estaba basada en la oficiosa “Pequeña Copa Mundo de Clubes” (por
invitación) que se disputaba en el estadio Olímpico de Venezuela durante la
década de los cincuenta y sesenta.
No obstante, durante esa etapa hubo algunos
puntos negros que terminaron por “degradar” la competición y que perdiera todo
su prestigio adquirido en la primera década.
La renuncia de cuatro clubes europeos a
disputar la Copa fueron los que “rompieron” la cadena. El primero en dar la
nota fue el Ajax de Amsterdam (1971 y 1973) que rechazó viajar a América y
despreció por dos veces el evento. Después, le siguieron los clubes ingleses
del Liverpool (1977) y el Nottingham Forest (1979).
Los otros puntos negros se producen en 1975
y 1978, años en los que no disputa la Copa Intercontinental, por desavenencias entre
las dos Federaciones y sobre todo por los clubes europeos.
Al participar en esas cuatro ediciones los
“sub campeones europeos” el evento perdió, lógicamente, su gran interés y
prestigio. Sin menospreciar al Panathinaikos de Atenas, Juventus de Torino,
Borussia Moenchengladbach, Malmöe de Estocolmo que se midieron con los
campeones de América (Copa Libertadores de América). El otro caso que se produce
es la incomparecencia del Olympique de Marsella (1993) aunque por motivos
diferentes, compitiendo el sub campeón, AC Milán. Un escándalo financiero fue
la causa de la no participación del club francés.
ACalcio Milán |
JAPÓN ACOGE LA “COPA” E INTERVIENE
FIFA
Lo más increíble son los “caprichos” del
Ajax de Amsterdam, causante principal de “boicotear” la Copa Intercontinental.
Acude en 1972 para jugar con el CA Independiente de Buenos Aires y gana el
trofeo. Sin embargo, al año siguiente renuncia otra vez a competir. Lo mismo
ocurre con el Liverpool, que cambia de opinión en 1994, y es derrotado por los
rojos de Avellaneda.
Historias más o menos absurdas que ayudaron
a desprestigiar la Copa, dejándola a la mano de Dios. Vamos, en peligro de
“muerte” ante la estupefacción de los clubes y aficionados americanos.
Tampoco nos sorprenden estos “caprichos” en
el fútbol. Ya, en la primera Copa del Mundo disputada en Uruguay (1930) los
países europeos hicieron un “boicot” sin ningún motivo aparente, renunciando a
la competición de la FIFA. No había motivos: los gastos corrían a cargo del
país organizador. Total, la primera Copa Jules Rimet se disputaría con 13
participantes en lugar de 16, como estaba previsto su formato.
A pesar de los intentos europeos a dar una
“zancadilla monumental” a la Copa Intercontinental siguió su camino. Con
problemas y desavenencias, pero siguió su camino. Hasta el nuevo “Millenium”
del S. XXI. Con publicidad, como el de la Copa Toyota. Los japoneses compraron
los derechos. No se jugaba a dos partidos, sino a un partido único. Lo mismo
que una gran final.
El país del sol naciente consiguió que el
fútbol creciera. No solo como espectáculo, sino también en la práctica.
Aumentaron los clubes de fútbol y el deporte entró como un ciclón en los
colegios. Ha quedado bien claro su evolución en los pasados Juegos Olímpicos
disputados en Inglaterra. La selección nipona junto a la de Senegal fue la
revelación de los juegos.
Real Madrid Club de Fútbol (España) |
NUEVO FORMATO, MÁS
CONTINENTES
La FIFA intenta rescatar la Copa Toyota el
año 1999 para transformarla en una competición
de una forma más equitativa. Su intención es cambiarle el nombre: Campeonato
del Mundo de Clubes y aumentar la participación de equipos. Engloba todos los
continentes y al club anfitrión. Sin perder el verdadero sentido de la Intercontinental,
ya que los campeones de América y de Europa entran en las semifinales del
torneo.
Sin embargo, hasta el año 2005 la FIFA no
pudo llegar a un acuerdo con la firma multinacional Toyota (dueña de los
derechos de la Copa Intercontinental). Al final termina fusionándose la “Intercontinental”
y “Toyota”, tomando parte igualmente la compañía japonesa en la nueva
competición.
El evento, no obstante, es más ambicioso. El
formato se va a cambiar. Se pretende llegar a los 16 equipos. Estamos hablando
de un “embrión”, en el que todo depende de la aceptación de los aficionados y
de las distintas firmas publicitarias. Al mismo tiempo la FIFA promociona el
deporte del fútbol.
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