sábado, 18 de enero de 2014

Ballon D´OR/ SE IGNORAN LAS REGLAS



FIFA apuesta por un
premio mercantilista

Por Miguel Miró
El sentido del humor de la publicación “France Football”, por más que intente pasar página, no denuncia las irregularidades del Balón de Oro 2013. No consigue explicar –y menos poniendo en ridículo al francés Franck Ribèry– cómo la FIFA, su socio, no cumple con el artículo 9º del premio que dice textualmente:
                                        
1. Resultados obtenidos de forma individual y colectiva durante el año.
2. La clase de jugador (talento + juego limpio).
3. La carrera profesional del futbolista.
4. La personalidad y carisma del jugador.
                                        
Los votantes deben elegir al mejor jugador del año teniendo en cuenta dichas consideraciones importantes.
No obstante, la pregunta es:
¿Podemos creer que cada uno de los 591 votantes –periodistas,  seleccionadores y capitanes–  siguieron rigurosamente los criterios del reglamento para dar su voto en esta ocasión?
Eso únicamente lo saben quienes ejercieron el derecho a elegir y se completa con el recuento de los votos escrutados. Un segundo paso que corresponde a la revista France Football o a la presuntamente “maquinaria” de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA).
Un organismo  que representa a un total de 209 países, 17 más con respecto a las Naciones Unidas (ONU). Cabe recordar que se unificaron los trofeos en 2010 y la Federación Internacional pagó €17.000.000 a la publicación francesa.
Algo que deja de manifiesto un tufillo extraño:
“El que paga, manda”.


FIFA IGNORA REGLAS Y TEMPORADA
A nadie puede extrañar, entonces, que la FIFA se saltara a la torera el “reglamento” del trofeo como también “no respetara” los meses –agosto 2012 a junio 2013– que corresponden a una temporada futbolística (2012-2013) en la que se disputan las distintas competiciones nacionales y europeas.
Decimos esto por los tres candidatos al premio. Los tres futbolistas participaron en dos campeonatos nacionales del Viejo Continente: Franck Ribèry (Bundesliga, Alemania), Lionel Messi y Cristiano dos Santos (Campeonato de Liga, España).
Al no contemplar la FIFA como corresponde este detalle tan importante: periodo de competiciones europeas, se produjeron estas irregulares.
¿Por negligencia, olvido o descuido presuntamente provocado?  Evidentemente aprovecharon “esa enorme laguna” del tamaño de un Océano que se define como “año” y las reglas del artículo 9º para justificar la última elección que a muchos supone presuntamente manipulada e  interesada.
Estas circunstancias, además de otras presiones –que no son moco de pavo– son la llave para que salten las lógicas dudas sobre la elección del Balón de Oro. En una palabra, unas votaciones limpias y transparentes.
  

LOS PERIODISTAS VOTAN A RIBÈRY
Los periodistas de todo el mundo –un total de 173­– dieron su veredicto. La mayoría de ellos: corresponsales de France Football, cinco de la redacción central de París y unas decenas  de informadores elegidos por la FIFA.
Fieles al reglamento del trofeo –que se mantiene durante décadas– los resultados dieron la victoria a Franck Ribèry con 514 votos. En segunda posición al luso Cristiano dos Santos (399) y Lionel Messi (364), tercero.
La elección del francés, figura de Bayern Münich, fue por más de 100 votos. Con respecto a Cristiano, 115 y a Messi, 150 votos respectivamente.
En una palabra, si se hubiese mantenido el Balón D´Or bajo la idea y organización de la revista France Football el triunfo hubiese sido para el galo Ribèry que cumplía rigurosamente con los cuatro puntos del artículo 9 del reglamento de trofeo.
INDIVIDUAL.- La gran figura del ataque de Bayern Münich es Ribèry. Además, es galardonado como “jugador del año” por la Unión Europea (UEFA).
COLECTIVO.- Ribèry ganó, junto al equipo bávaro, cinco títulos. 1, Bundesliga. 2, Copa de Alemania. 3, UEFA Champions League. 4, Super Copa Europa. 5, World Club FIFA (mundial de clubes).
Nota./El último trofeo corresponde a la temporada, teniendo en cuenta las fechas en que se dirimen y los rivales de los otros continentes. En cuanto a la Super Copa de Europa, enfrenta a los campeones de los dos torneos Europeos.
TALENTO Y JUEGO LIMPIO.- Jugador desequilibrante y pieza básica en el equipo Bayern Münich. No suele ser díscolo dentro del campo, todo lo contrario. Por su dribling corto y la forma de proteger el balón, recibe demasiadas tarascadas.
CARRERA PROFESIONAL.- Francia, Turquía, otra vez Francia y Alemania. En los tres países se pueden ver los destellos de Ribèry que ahora juega de “falso 9” en el equipo bávaro. Triunfó claramente como extremo derecho. Por su explosión en la salida y su exquisita técnica. Comparable a Raymond Kopa de los años cincuenta: virtuoso técnicamente, dribling corto endiablado y también como goleador. Empieza su carrera en Boulogne, pero donde triunfa realmente es en Metz. Traspasado al club Galatasaray explota su verdadera clase. Figura, después en Olympique de Marseille y el salto al fútbol alemán. Pretendido por Real Madrid, Barcelona y Manchester United, en 2010 renueva en la final de la Copa de Europa con el club bávaro, que se disputó en Madrid.
PERSONALIDAD Y CARISMA.- Hasta cuando jugaba en la calle, de chiquillo, siempre ha demostrado una desbordante personalidad. Ribèry es un líder táctico, capacitado para marcar la diferencia en cualquier match. Asimismo, trabaja para el resto de sus campañeros y siempre se muestra generoso en los pases de gol.


FIFA Y SU ESTRATAGEMA
La estratagema de alargar las votaciones deja a la Federación Internacional “con el culo al aire”. Porque estira como un chicle “el año 2013”, que no la temporada de los tres candidatos y se “carga” de un plumazo las reglas del Balón de Oro.
¿Por qué?
Por las eliminatorias y el “repechaje” de la Copa del Mundo FIFA 2014 que coinciden en la fecha del cierre de las votaciones (15 de noviembre). Y la trascendencia de “los goles de Cristiano” dos Santos Aveiro (aunque en su camiseta figura Ronaldo), que puede repercutir en las votaciones de los seleccionadores y capitanes.
Bien, pero también estaba Francia con Franck Ribèry y Uruguay, con Luis Suárez.
Y Slatan Ibrahimovic en Suecia.
Ahí está el santo y seña: no se trataba de un Portugal-Suecia. El match se le llamaba Cristiano versus Ibrahimovic. Ribèry pasó a un segundo plano, y el uruguayo estaba ya fuera de los tres candidatos al premio.
En una semana –para ser más exactos, 16 días– se modificó todo. Reglamento, temporada y las votaciones por internet y “a la carta”. Con derecho a rectificar todos aquellos que habían votado.
Las reglas se “rompen” en mil pedazos y la FIFA convierte el Balón de Oro en una repetición insulsa de la Bota de Oro que ganó Messi (46 goles, y el pichichi en la Liga Española, en la que Cristiano sólo consiguió 34 goles).
Invirtiendo “el año” –en año natural 2013 basándose en todo/goles– y olvidándose de las inmaculadas reglas del trofeo.

¿PRESIÓN DE REAL MADRID?
Eso fue lo que “vendieron” algunos medios españoles. Sin embargo, la presión, la verdadera presión a la FIFA llegó a través de las marcas multinacionales deportivas: NIKE y ADIDAS.
No se necesita ser un lince. Basta comprobar el Once Ideal de la FIFA, en el que gana por goleada ADIDAS.  Y todos contentos. Por eso se conocía con antelación el premiado.
Primera revelación:
“Se prorrogan las votaciones para que gane Cristiano”.
La frase, rotunda frase, proviene del presidente de la UEFA, Michel Platini en una entrevista exclusiva de un periódico deportivo de  Madrid.
Cristiano dos Santos, igualmente, se retrata en la misma fiesta del Balón de Oro en Suiza. En los momentos previos, durante las entrevistas a los tres candidatos al premio.
Cristiano luce NIKE en su camiseta, y alguien con buen criterio le llama la atención sobre su gorra. Por eso se la coloca al revés. El portugués de Real Madrid quiso hacer la gracia de Neymar, pero no le salió bien. Por primera vez se le ve con la camiseta de Nike, pero una gorra de Nueva York se comía las fotos.
Otro detalle significativo: el gráfico de los tres candidatos que publicó con anterioridad un diario de tirada nacional. En dicho trabajo ya ponía en evidencia los 69 goles de Cristiano.
El mismo gráfico (con una presentación distinta) que se exhibió en la gala del Balón de Oro.
En principio pensamos que la información se la había brindado el club Real Madrid. Pero no. La filtración le llegó de Canal + Francia. Otra dato que demuestra, una vez más, que no suponía un secreto el vencedor del premio. Se conocía el nombre.


UN BALÓN MERCANTILISTA
¿Se ha perdido el encanto y el glamour del Ballon D´Or?
En cierta forma, sí. Por las irregularidades del último galardón y por la intromisión absolutista de Joseph Blatter, presidente FIFA que se cargó las reglas y lo transformó en un premio de hoja-lata y mercantilista.
La presión de las políticas de las multinacionales y los intereses creados primaron más que una votación limpia y transparente.
Blatter hizo y deshizo en el reino de la FIFA. El fiel y obediente “secretario” que le dio una soberana patada a su “mentor” (Joao Havelange) y otra a su posible rival en el cargo (Texeira). Todo a raíz de un escándalo sobre negocios turbios en el seno del organismo que sorprendente Blatter salió ileso, a pesar de un libro acusador de un periodista-investigador británico.
Aunque dejase “en el hospital” al trofeo –Ballon D´Or– una idea original de Gabriel Hanot, director de France Football en 1956, es posible (todo es posible en la vida, dicen) que pudiese recuperarse con el futuro y nuevo presidente de la FIFA.
Joseph Blatter dejará próximamente su cargo en el máximo organismo mundial, pero también le traspasará a su sucesor el escándalo sin resolver del Mundial 2020.
En caso contrario, Michel Platini ya ha dado los pasos necesarios para reeditar y resucitar al “mejor jugador del año en Europa”. Basándose en las mismas reglas de France Football, temporada a temporada, y a través de la prensa especializada europea.
Un premio que se entrega conjuntamente con el sorteo de grupos de la UEFA Champions League.
Se cumplieron tres ediciones y los ganadores fuero Lionel Messi (2011), Andrés Iniesta (2012) y Franck Ribèry (2013).

0 comentarios:

Publicar un comentario