Diametralmente
“diferentes” el uno
del otro
Por Miguel Miró
Incluso en el carácter, actitud y estilo, Diego
López e Iker Casillas son dos guardametas diametralmente diferentes.
Partimos de la base de que el madrileño es muy intuitivo y su compañero gallego
es muy metódico. Por tal motivo sus
cualidades son antagónicas. Aunque ambos sean eficaces en su profesión.
Ahora bien, si a la hora de la comparación
(odiosas, sinceramente) existen éstos variantes, la elección siempre es complicada
para el entrenador, llámese como se llame.
Se nos antoja, en su papel actual –siempre
poniendo como ejemplo su club– depende igualmente de la sensibilidad o
experiencia del técnico en dicha elección. Y por supuesto debe decidirse por la
espectacularidad o la sobriedad.
¿Por qué?
Por la actividad que tiene el guardameta entre los
tres palos. Una de las diferencias “enormes” que se producen entre
equipos/grandes y equipos/chicos.
--Actividad pausada y trabajo intermitente, en
unos casos.
--Actividad frenética y trabajo constante en
otros.
Por ese motivo no vale cualquier guardameta según sea
el club. Este no es un punto de vista,
sino una reflexión. Casi siempre resulta complicado elegir en el momento de
contratarle.
Dependiendo de las necesidades de cada sociedad
deportiva se debe dar en la tecla siempre, con el consenso de varios
especialistas. Y aún así hay alguno o algunos que no se ponen de acuerdo.
NO SON DOS EXTRAÑOS
El caso de Iker Casillas y Diego López se da una
circunstancia similar. Tienen la misma edad (32). Están equilibrados en el
peso/altura. [Casillas 1,85/84kg; López 1,96/88kg]. Ambos proceden de la
cantera de Real Madrid. Y los dos subieron al primer equipo en la época de Vicente del Bosque.
--Ayer, Diego López suplente de Casillas en todas
las competiciones.
(El guardameta gallego acepta un traspaso a
Villarreal, donde triunfa con todos los honores. Participa en las tres
competiciones: Liga, Copa de España y campeonatos europeos. Igualmente juega
las semifinales de la Champions League con el submarino amarillo).
--Hoy, Casillas suplente de Diego López en la Liga.
(Una inoportuna lesión de César Sánchez, un gran
guardameta, serio y con grandes recursos, le permite debutar a Casillas en los
tres palos de Real Madrid en la Copa de Europa, en Glasgow. Ante el Celtic
realiza una gran actuación. Una trayectoria meteórica y larga. Por su amor
propio fue mejorando constantemente en su carrera deportiva. Hasta llegar a ser
fijo y “aburrir” a César que decide cambiar de club [Zaragoza]. Casillas,
además, pasa a ser capitán del equipo)
Contar con dos guardametas de alto nivel no debería
ser ningún problema para cualquier entrenador.
Todo lo contrario.
Supone un gran desahogo y una total garantía poder
contar con dos buenos porteros. Máxime teniendo en cuenta que la temporada es
larga y el calendario super espeso (matches apretados, a tres días). Del mismo
modo cada año se presenta más duro y complicado, al multiplicarse varios
torneos entrelazados entre sí.
Estamos hablando de una media de 65 o 75 partidos,
sin contar los amistosos y la pre temporada.
Por otro lado, existen casos similares en Real
Madrid –años atrás– y no se produce ninguna polémica.
Basta con un ejemplo: Miguel Ángel Amador y Mariano
García Remón se disputaron la titularidad en el equipo y no se produjo ningún
atisbo de problema. Ni siquiera entre los buenos aficionados al fútbol y socios
del club que también tienen sus preferencias o gustos.
POLÉMICO Y RENCOROSO MOURINHO
Las luces “mediáticas” iluminaron a José Mourinho
como el nuevo “Mesías”. De la misma forma que desprestigiaron sin decoro y sin
justificación alguna a Manuel Pellegrini, señalándole el destierro. Una campaña
“bestial” preparada y ejecutada de forma vergonzosa, presuntamente organizada
por ciertos personajes vinculados al club blanco.
Nadie conocía personalmente a José Mourinho, pero
sí sus títulos conseguidos en Oporto, Chelsea e Internazionale de Milán.
Tampoco nadie sabía la desvinculación de André Villas Boas (la esencia gris)
del equipo técnico del entrenador portugués.
Florentino Pérez le ficha “con la promesa” de ganar
la décima Copa de Europa para las vitrinas del club, Real Madrid.
Con el “yoismo” subido, Mourinho declara: “Mi tercera Champions”.
(No es una imaginación nuestra, está reflejado en
letras de imprenta en todos los periódicos).
Iker Casilla, como capitán, y toda la plantilla
está “a muerte” con su nuevo entrenador José Mourinho durante el primer año. No
es ningún secreto. El primero que se moja es precisamente el guardameta y
cumple a rajatable las órdenes del nuevo técnico.
Hasta que conocen su carácter, sus fobias y su
lado “histriónico” que trataremos en profundidad en otro artículo.
Iker Casillas y muchos integrantes del plantel (a
excepción del grupo de Jorge Mendes) se dieron cuenta de la violencia que
generaban los clásicos por el “odio” enfermizo del luso al FC Barcelona.
La “guerra” de los cuatro partidos Real
Madrid-Barcelona en 18 días, repercutían directa o indirectamente en la
selección nacional y se corta por lo sano entre los jugadores de los dos
equipos. De forma privada –para ser exactos– entre Iker Casillas, Javier Xavi
Hernández y Carlos Puyol.
En ese momento, Mourinho tiene entre cejo y cejo a
Casillas.
Después se produjo el “chivatazo” del vestuario,
donde el técnico se puso histérico pidiendo el despido de un cocinero, un
cualificado médico… y aunque no lo dijera públicamente señaló (a través de sus
colaboradores) al guardameta madrileño y al delantero argentino Gonzalo Higuaín.
La persecución –propio más de un “maniático” que
de un técnico– tiene su premio: quitarle el puesto de titular a Iker Casillas
en el equipo merengue. Una postura equivocada. El madrileño “NADA TENÍA QUE VER
CON EL CHIVATAZO”. Simplemente habladurías y sospechas por su mujer, Sara
Carbonero.
El guardameta, a pesar de la montaña de críticas,
siempre ha sido fiel a su club.
LLEGA DIEGO LÓPEZ
La llegada de Diego López se produce con urgencia,
después de una lesión de Iker Casillas en partido de Copa entre Real
Madrid-Valencia. Por una patada “fortuita” de Arbeloa al intentar un despeje
chocó con la mano izquierda del guardameta. (25-01-2013).
Decimos “fortuita” entre comillas, porque en la
misma temporada, en el primer match de Liga, precisamente ante el equipo
valenciano, Casillas recibe un rodillazo “fortuito” de Pepe en la espalda. En un
salto, que supuso un gol de Jonas (1-1).
Mourinho aconseja al presidente que contrate al
brasileño Julio César, ex Inter y suplente en el QPR de la Premier League. Sin
embargo, el técnico portugués ya se había comprado una casa en Londres, (propiedad
del dueño de Chelsea, Abramovic) y ya tenía los días contados en Real Madrid.
Igualmente los periódicos británicos ya habían
dado la noticia que se había comprometido con el club londinense.
Son otros técnicos de Real Madrid quienes eligen a
Diego López que había firmado contrato por Sevilla un año antes (€3,5 millones
recibiría Villarreal). Asimismo, había pertenecido a la cantera del club
merengue. Esto influye en la rapidez de su contratación.